Hoy cumplo setenta y tres años. No sé si son muchos años pero me encuentro muy bien. Es verdad que las arrugas van invadiendo mi cuerpo y las barbas se me han quedado canas, que he sustituido el vino en las comidas por un revuelto de medicamentos variados, que mi masa muscular se encoge sin permiso cada día, que ni quiero ni me acuerdo ya de presumir de potencia sexual y que, además, tengo cáncer. Quizás son razones más que sobradas para pensar que ya no soy lo que era. Y es verdad. Pero no lo añoro. Me gusta mucho este yo de ahora y lo disfruto. Sé que tengo que decirlo bajito pero, sea por inconsciencia, por inocencia o por falsa ilusión, lo cierto es que tengo la sensación de que me encuentro en el mejor momento de mi vida.
Un rincón amigo en el que ir soltando pensamientos variados, desvaríos circunstanciales y otras tonterías mil, al objeto de ahorrame la pasta gansa que, de no ser por este refugio, tendría que pagarle al psiquiatra
jueves, 15 de junio de 2023
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