domingo, 31 de diciembre de 2023

Un año especial

    Atrás queda un año que a mí me ha señalado especialmente, un año salpicado de dudas ruidosas y tensiones existenciales, de sinsabores y contrariedades inesperadas, un año agitado pero al que, en el fondo, estoy agradecido. 

    El que me hayan detectado un cáncer en 2023 le dejará marcado para siempre en mi calendario como un año con sabor amargo, pero para mí también ha sido un año amable que, por suerte, me ha permitido redescubrir la mirada cercana de la gente querida, que me ha servido además para volver a sentir con claridad mis aletargados latidos más profundos y un año, en fin, en el que he encontrado nuevos rincones encantadores en los ásperos caminos por los que discurro. Son regalos importantes que compensan la amargura inicial. 

    Yo no quiero esperar que el nuevo año me llene de venturas y prosperidad como se suele desear. A mí me resulta suficiente con que me permita seguir convencido de que incluso sabiendo que la historia se puede acabar en cualquier momento el porvenir es largo. 

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